Qué es la envidia
La envidia es un sentimiento o pasión negativa de malestar o desagrado que tiene la persona, a veces asociado a la rabia y tristeza, cuando alguien se entera o percibe que otro ha logrado o posee algo que desea intensamente para si mismo y de lo cual carece. Algunos la definen como el pesar por el bien ajeno, el deseo de lo que no tengo o no soy. Por ejemplo obtener un mérito especial, tener una relación amorosa exitosa, un triunfo o premio, viajes, ingresos o abundancia. También se manifiesta más frecuentemente cuando se detecta que otro posee o adquiere ciertas cualidades o competencias valoradas como superiores o difíciles, comparándolas con las propias.
La envidia es considerada uno de los 7 pecados capitales o pasiones, descritos en la teología de la Edad Media por la iglesia católica. Un exceso de envidia puede llevar a una persona a querer arrebatar ese logro a como de lugar, o a dañar a quien lo posee. Y siempre conduce al sentimiento de amargura e infelicidad.
La palabra envidia fue asociada por los griegos al mal de ojo, porque todo comienza cuando veo en otro lo que deseo para mi, cuando me comparo con los demás. Fue representada por ellos como un monstruo con una cabeza llena de culebras, ojos hundidos y agresivos y muy pálida, capaz de ahogar cualquier cosa meritoria. Muchos otros artistas también la representaron de forma horripilante. Igualmente ha sido descrita por muchos escritores
como Shakespeare, Descartes, Schopenhauer, entre otros.
A veces decimos sentir una “envidia sana”, pero la envidia no es sana, aunque si lo es la admiración por el otro o el reconocimiento por lo bien que hace determinada cosa y en todo caso esa admiración debería estimularlo a esforzarse más en seguir su ejemplo o modelo. Lo contrario puede llevar al resentimiento, que es peor que la envidia.
Existe un dicho que dice “si la envidia fuera tiña, todo el mundo moriría”, para señalar lo frecuente y venenoso de la envidia. Y otro que reza: “la presencia de la envidia es una declaración de inferioridad”, refiriéndose a la baja autoestima del envidioso. Existe este proverbio chino relacionado a la envidia: “el clavo que sobresale, siempre recibe un martillazo”, porque el envidioso no desea el éxito ajeno y lo combate. La envidia también
nos afecta fisiológicamente, presentándose problemas musculares, de movilidad y gastrointestinales cuando es intensa y persistente.
Cómo controlar la envidia?
La envidia es un sentimiento tóxico que todos los seres humanos podemos sentir, pero es posible controlar para que no sea dañina para nosotros, reconociéndola cuando la sentimos, atenuándola, dándonos cuenta de los límites personales y aceptándolos como propios, evitando nuestra propia descalificación, pero a la vez poniendo atención preferente a nuestras posibilidades, enfocándonos en desarrollar nuestros propios talentos y fortalezas,
mejorarlos y valorarlos, en vez de envidiar los de los demás.
Otros neutralizadores de la envidia son la alegría, el amor hacia los demás, la generosidad, desde cuyos núcleos no es posible que surja. Porque cuando amamos de verdad somos felices por ellos. También la gratitud, por lo que tenemos o poseemos, el respeto hacia uno mismo, considerándonos seres únicos con oportunidades y momentos de éxito. Pero sobre todo, hay que evitar las comparaciones, esforzarse en expresar palabras positivas por los
triunfos de los demás, así como compasión y solidaridad por el fracaso de otros, evitar comentarios críticos que menoscaben o destaquen errores; disfrutar lo que se tiene en este momento.
Como reconocer a una persona envidiosa?
Como la envidia es una emoción secreta, es difícil de detectar, pero por lo general se observa que un envidioso no soporta que la gente sea reconocida o tenga éxito porque significa un fracaso para si mismo. Igualmente cuando el otro fracasa lo siente como si fuera un éxito, recuperando su alegría. Frecuentemente intentará bloquear al otro y se da en pares de personas, diferente a lo que sucede en los celos que ocurre entre tres personas.
Por lo general, el envidioso distorsiona lo que percibe desde su propia carencia que le impide ver lo positivo del otro y más bien critica o descalifica. Dice por ejemplo, “no sé como esta persona pudo obtener ese éxito… cómo pudo ser elegida por ese hombre… de donde sacó dinero para comprarlo… no sé qué de bueno pueden ver en el… los idiotas tienen suerte… cualquiera puede ser escritor o actor”… o lo que sea.
Cómo detectar la envidia en ti mismo?
Cuando te comparas mucho con los demás, o dices esas frases, cuando te entristeces o no te alegras por el éxito ajeno, cuando no te apenas por el fracaso de otro, cuando juegas al si pero…cuando otro obtiene algo; por ejemplo, “si, se casó, pero no el la vive a ella”; cuando crees que la solución a un problema implica quitarle a otro algo, sintiéndote superior a los demás; cuando no eres agradecido a lo que posees u obtienes; cuando sobredimensionas lo que otros tienen y eso te hace sufrir, sumando una baja autoestima de tu propio valor; cuando te crees superior y eres arrogante; cuando sientes que tienes muy poco y los demás mucho; cuando no reconoces el esfuerzo de otros por obtener lo que tienen.
Cómo evitar la envidia especialmente en las redes sociales?
Si no quieres que alguien te envidie, hay un dicho popular que dice que “ante la envidia no compartas las bendiciones” a todo el mundo, sin límites. Procura no contar los éxitos, los planes muy positivos como vacaciones, viajes, aumentos de sueldo, compromisos amorosos o triunfos, sino cuando haya pasado un tiempo desde su logro.
Este consejo está sustentado en una investigación realizada por el Dr. Kristal y otros investigadores de la Universidad de Chicago, publicado en la Revista Psychological Science en el año 2019. Utilizaron 4000 sujetos voluntarios en dos oportunidades. En una debían imaginar que una persona muy cercana iba a realizar una acción que ellos desearían, como por ejemplo comprarse una casa o hacer el viaje de su vida. En otra iban a imaginar tener una cita amorosa para el día de los enamorados. Se les pasaba una escala sobre su grado de envidia y de admiración o inspiración. Los resultados indicaron que el grado de envidia variaba según el tiempo. Si el suceso no había ocurrido o faltaba muy poco, el grado de envidia era mayor que si ya había sucedido hacía un tiempo. Pero el grado de admiración o inspiración no variaba con el tiempo.
Estaré gustosa de ayudarte mediante algunas consultas psicológicas, a superar y atenuar tus intensas emociones o estados de ánimo alterados, cuyas consecuencias puedan reflejarse en tu salud, crisis de vida, relaciones de pareja y toma de decisiones. Existen muchas estrategias para ayudarte, pero requiere persistencia. No hay soluciones mágicas. Puedes escribirme a través de mis redes sociales, donde con gusto puedo atender tus preguntas y consultas.
Fuente: Curadas.com Disponible en: https://curadas.com/2020/01/26/la-envidia-y-las-redes-sociales/